HISTORIA DE LA IGLESIA ADVENTISTA DEL SEPTIMO DIA
En apenas un siglo y medio la Iglesia Adventista del Séptimo Día ha crecido de un puñado de personas, que diligentemente estudiaron la Biblia en búsqueda de la verdad, para una comunidad mundial de mas de ocho millones de miembros y, otros millones, que consideran la Iglesia Adventista su hogar espiritual.
Doctrinariamente, los Adventistas del Séptimo Día son herederos del supradenominacional movimiento Milleriano de la década de 1840. Aunque el nombre “Adventista del Séptimo Día” haya sido escogido en 1860, la denominación no fue oficialmente organizada hasta el 21 de mayo de 1863, cuando el movimiento incluía cerca de 125 Iglesias y 3.500 miembros.
Entre 1831 y 1844, Guillermo (William) Miller - un predicador Bautista y ex-capitán de Ejército de la Guerra de 1812 - lanzo el grande despertar del segundo advenimiento, el cual eventualmente se dispersó a través de la mayoría del mundo cristiano. Basado en su estudio de la profecía de Daniel 8:14, Miller calculo que Jesús podría retornar a Tierra el 22 de octubre de 1844. Cuando Jesús no apareció los seguidores de Miller experimentaron lo que se vino a llamar “El Gran Chasco”.
La mayoría de los millares que se habían juntado al movimiento, salio en profunda desilusión. Unos pocos no en tanto, regresaron para sus Bíblias para descubrir porque ellos fueron decepcionados. Luego ellos concluyeron que la fecha del 22 de octubre era correcta, pero que Miller había predicho el evento errado para aquel día. Ellos se convencieron de que la profecía bíblica preveía no el retorno de Jesús a la Tierra en 1844, pero que El comenzaría en aquella fecha un ministerio especial en el cielo para Sus seguidores. Así, ellos continuaron a esperar por el breve retorno de Jesús, como hacen los Adventistas del Séptimo Día aun hoy.
De este pequeño grupo que se rehusó a desistir después del gran Chasco, surgieron varios líderes que construyeron la base de lo que vendría a ser la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Se destacan dentro de estos líderes una pareja joven – Santiago y Elena White - y un capitán de navío jubilado, Jose Bates.
Este pequeño núcleo de “adventistas” comenzó a crecer - principalmente en los estados de la Nueva Inglaterra en la América del Norte - adonde el movimiento de Miller había comenzado. Elena White, apenas una adolescente en la época del gran Chasco, se desenvolvió en una dotada escritora, oradora y administradora, tornandose,y permaneciendo, la consejera espiritual de confianza de la familia Adventista por mas de 70 años hasta su muerte en 1915. Los primeros adventistas vinieron a creer - como los Adventistas desde entonces - que ella disfruto de la dirección especial de Dios mientras ella escribía sus consejos para el creciente grupo de creyentes.
En 1860, en Battle Creek, Michigan, EUA, un puñado de congregaciones de Adventistas escogieron el nombre Adventista del Séptimo Dia y en 1863 organizaron formalmente el cuerpo de la Iglesia con un número de 3.500 miembros. En el principio, la actuación fue en gran parte limitada en América del Norte, hasta 1874 cuando el primer misionero de la Iglesia John Nevins Andrews, fue enviado para Suiza. La obra en África fue iniciada tímidamente en 1879 cuando Dr. H. P. Ribton, un reciente converso en Italia, se cambio para Egipto y abrió una escuela, pero el proyecto termino cuando tumultos comenzaron a surgir en los barrios. El primer pais cristiano no protestante en recibir la iglesia fue Rusia, adonde un ministro adventista fue enviado en 1886. Misioneros adventistas entraron por primera vez en países no cristianos en 1894- Costa Dorada (Gana), oeste de África, y Matalbeleland, África del Sur. En el mismo año misioneros vinieron a América del Sur, y en 1896 había representantes en Japón. La iglesia hoy tiene actuación establecida en 209 países.
La publicación y distribución de literaturas fueron los principales factores en el crecimiento del movimiento del Advenimiento. La ‘Advent Review' y el ‘Sabbath Herald' (hoy ‘Adventist Review'), órgano general de comunicación de la Iglesia, fueron lanzados en Paris, Maine, en 1850; el ‘Youth's Instructor' en Rochester, Nueva York, en 1852; y el ‘Signs of the Times' en Oakland, Califórnia, en 1874. La primera Casa Publicadora denominacional en Battle Creek, Michigan, comenzó a operar en 1855 y fue debidamente incorporada en 1861 con el nombre de Asociación de Publicación Adventista del Séptimo Día.
El Instituto de Reforma de la Salud, conocido mas tarde como Sanatorio Battle Creek, abrio sus puertas en 1866, y la obra de la sociedad misionera fue establecida a nivel estatal en 1872, y 1877 vio la formación de las Asociaciones de las Escuelas Sabáticas en todo el Estado. En 1903, la sede de la denominación se cambio de Battle Creek, Michigan, para Washington, D.C., y en 1989 para Silver Spring, Maryland, a donde ella continua a formar el nervio central del trabajo siempre en expansión.